Despolitización = no democracia

Hace unas semanas terminé de leer “En defensa de la intolerancia” de Slavoj Žižek, y tenía a medias este post. Un libro interesante (y cortito). Entre otras cosas, da pistas para reflexionar sobre el significado de conceptos manidos pero de difícil definición, como política, ideología, fascismo o democracia. Dice que la hegemonía ideológica hoy se basa en la despolitización de la economía; es decir, que tras una apariencia de no ideología se esconde la terrible ideología de aceptar el dictado de la lógica de acumulación capitalista, pase lo que pase, sobre cualquier otra consideración. Oír y leer esto es relativamente habitual. Lo “novedoso” quizá del planteamiento de Žižek es cómo explica que opera esta hegemonía ideológica, qué forma adopta. El provocativo título hace referencia a ello: el título es precisamente la expresión de una forma de rebelarse contra esta hegemonía.

Comienza así:
    “La prensa liberal nos bombardea a diario con la idea de que el mayor peligro de nuestra época es el fundamentalismo intolerante (étnico, religioso, sexista…), y que el único modo de resistir y poder derrotarlo consistiría en asumir una posición multicultural.
    Pero, ¿es realmente así? ¿Y si la forma habitual en que se manifiesta la tolerancia multicultural no fuese, en última instancia, tan inocente como se nos quiere hacer creer, por cuanto, tácitamente, acepta la despolitización de la economía?
    Esta forma hegemónica del multiculturalismo se basa en la tesis de que vivimos en un universo post-ideológico, en el que habríamos superado esos viejos conflictos entre izquierda y derecha, que tantos problemas causaron, y en el que las batallas más importantes serían aquellas que se libran por conseguir el reconocimiento de los diversos estilos de vida. Pero, ¿y si este multiculturalismo despolitizado fuese precisamente la ideología del actual capitalismo global?
    De ahí que crea necesario, en nuestros días, suministrar una buena dosis de intolerancia, aunque sólo sea con el ánimo de suscitar esa pasión política que alimenta la discordia. Quizás ha llegado el momento de criticar desde la izquierda esa actitud dominante, ese multiculturalismo, y apostar por la defensa de una renovada politización de la economía.”
En el libro aporta numerosos ejemplos que ayudan a entender sus planteamientos conceptuales. En este post trato de recoger una de las líneas de argumentación que me parece clave.
En los dos primeros capítulos desarrolla el concepto de hegemonía, que permite comprender la estructura elemental de la dominación ideológica:
    “Cualquier universalidad que pretenda ser hegemónica debe incorporar al menos dos componentes específicos: el contenido popular “auténtico” y la “deformación” que del mismo producen las relaciones de dominación y explotación. Sin duda, la ideología fascista “manipula” el auténtico anhelo popular por un retorno a la comunidad verdadera y a la solidaridad social que contrarrestre las desbocadas competición y explotación; sin duda, “distorsiona” la expresión de ese anhelo con el propósito de legitimar y preservar las relaciones sociales de dominación y explotación. Sin embargo, para poder alcanzar ese objetivo, debe incorporar en su discurso ese anhelo popular auténtico. (…)
    Para que una ideología se imponga resulta decisiva la tensión, en el interior mismo de su contenido específico, entre los temas y motivos de los “oprimidos” y de los “opresores”. Las ideas dominantes no son NUNCA directamente las ideas de la clase dominante.”
Utiliza el ejemplo de los nazis, también del cristianismo, para ilustrar el concepto de hegemonía, y va sugiriendo su propuesta de que el liberalismo multiculturalista responde a este mismo patrón de hegemonía ideológica; es decir, bajo el disfraz del anhelo popular de “derechos para todos”, se esconderían y actuarían los verdaderos intereses de las clases dominantes: los intereses del capital y su lógica de acumulación.

A partir de aquí introduce el concepto de política:
    “¿Estamos condenados a movernos exclusivamente dentro del espacio de la hegemonía o podemos, al menos provisionalmente, interrumpir su mecanismo?”
La gran pregunta sería para mí: ¿Podríamos imaginar una sociedad que no respondiera a esquema de dominador/dominado? ¿Cómo operaría? ¿o volvería inevitablemente a contraerse como un muelle a un nuevo esquema de dominación hegemónica?
Desde una perspectiva bien distinta a la de Žižek, Erich Fromm en “Miedo a la libertad” habla de la tendencia humana a huir de nuestra propia libertad en favor de la seguridad (cita).
Pero nada puede ser duradero sin haber durado un poquito en algún momento. Por tanto, vamos a ver qué respuesta da Žižek a la pregunta que plantea, a cómo podemos "interrumpir el mecanismo", aunque sólo sea "provisionalmente":
    “Según Jacques Rancière, este tipo de subversión no sólo suele darse, sino que constituye el núcleo mismo de la política, del acontecimiento verdaderamente político.
    Pero, ¿qué es, para Rancière, lo verdaderamente político? Un fenómeno que apareció, por primera vez, en la Antigua Grecia, cuando los pertenecientes al
    demos (aquellos sin un lugar claramente definido en la jerarquía de la estructura social) (…) no sólo protestaron contra la injusticia (le tort) que padecían y exigieron ser oídos, formar parte de la esfera pública en pie de igualdad con la oligarquía y la aristocracia dominantes, sino que, ellos, los excluidos, los que no tenían un lugar fijo en el entramado social, se postularon como los representantes, los portavoces, de la sociedad en su conjunto, de la verdadera Universalidad (“nosotros, la ‘nada’ que no cuenta en el orden social, somos el pueblo y Todos juntos nos oponemos a aquellos que sólo defienden sus propios intereses y privilegios”). El conflicto político, en suma, designa la tensión entre el cuerpo social estructurado, en el que cada parte tiene su sitio, y la “parte sin parte”, que desajusta ese orden en nombre de un vacío principio de universalidad (…), el principio de que todos los hombres son iguales en cuanto seres dotados de palabra. (…) Esta identificación de la no-parte con el Todo, de la parte de la sociedad sin un verdadero lugar (o que rechaza la subordinación que le ha sido asignada), con el Universal, es el ademán elemental de la politización, que reaparece en todos los grandes acontecimientos democráticos, desde la Revolución francesa (cuando el Tercer Estado se proclamó idéntico a la nación, frente a la aristocracia y el clero), hasta la caída del socialismo europeo (cuando los “foros” disidentes se proclamaron representantes de toda la sociedad, frente a la nomenklatura del partido). En este sentido, “política” y “democracia” son sinónimos: el objetivo principal de la política antidemocrática es y siempre ha sido, por definición, la despolitización, es decir, la exigencia innegociable de que las cosas “vuelvan a la normalidad”, que cada cual ocupe su lugar… La verdadera lucha política, como explica Rancière contrastando a Habermas, no consiste en una discusión racional entre intereses múltiples, sino que es la lucha paralela por conseguir hacer oír la propia voz y que sea reconocida como la voz de un interlocutor legítimo.”
    “La filosofía política, desde su origen (desde
    La República de Platón) hasta el reciente renacer de la “filosofía política” liberal, ha venido siendo un esfuerzo por anular la fuerza desestabilizadora de lo político, por negarla y/o regularla de una manera u otra y favorecer así el retorno a un cuerpo social pre-político, por fijar las reglas de la competición política, etc.”
    [es] conocida la definición de la política como “arte de lo posible”: la verdadera política es exactamente lo contrario: es el arte de lo imposible, es cambiar los parámetros de lo que se considera “posible” en la constelación existente en el momento.”
Si aceptamos este enfoque, la verdadera democracia sería un conflicto continuo, un flujo continuo, donde no pudiera establecerse ninguna hegemonía[1]. Entonces, estaríamos en un contexto post-político –interpreto-, ya que como dice Žižek el conflicto político requiere una “parte sin parte”, una entidad desconectada, desubicada, que se presente y/o se manifieste como representante del universal. El fin de la historia de Fukuyama trataría de argumentar, según mi interpretación, que ya ha llegado ese contexto post-político. Žižek, en cambio, con argumentos contundentes expone lo que, por otra parte, es obvio, que hoy hay “partes sin parte”, entidades desconectadas, desubicadas, y a esta constatación añade que a través del multiculturalismo se manipula el anhelo popular de “derechos para todos”, mientras subyace una lógica (la de la acumulación capitalista) que rige comportamientos y vidas; es decir, que bajo la deformación del multiculturalismo se esconde la verdadera ideología hegemónica (la de las clases dominantes) que no es otra que la "sacralización" de la economía y su consiguiente despolitización.

Para terminar recojo esta frase de Žižek sobre la lógica del capital… Es terrorífica, por un lado, pero también nos habla del poder que cada uno de nosotros tenemos de que a través de nuestro propio cambio contribuyamos a la transformación de la sociedad, ya que –por decirlo de alguna manera- el sistema opera a través de cada uno de nosotros:
    “Lo verdaderamente terrorífico no está en el contenido específico oculto bajo la universalidad del Capital global, sino más bien en que el Capital es efectivamente una máquina global anónima que sigue ciegamente su curso, sin ningún Agente Secreto que la anime. El horror no es el espectro (particular viviente) dentro de la máquina (universal muerto), sino que la misma máquina (universal muerto) está en el corazón de cada espectro (particular viviente).”
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[1] En una entrevista que concede Alfonso a L’Apòstrof (podéis acceder desde aquí a esta entrevista completa), plantea un concepto muy similar de democracia, aplicado en este caso a la organización:
    “El desacuerdo entre personas libres es la fuente de todo progreso; si todos estuviéramos “de acuerdo” la evolución habría terminado. El desacuerdo, o el conflicto, está muy mal visto porque impacta contra las estructuras de poder establecidas. Si yo “mando”, yo tengo razón por origen, por lo que el desacuerdo es un desafío. En empresas abiertas, más democráticas, el “conflicto” abre las puertas del futuro. Al fin y al cabo, ¿qué es la democracia más que la asunción del derecho al conflicto y a su resolución (algo) pacífica?”
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Relacionado con esto:
El miedo a la libertad (post-cita), 20/10/2008
Cuaderno de Trabajo 2: Lógicas
La pregunta pertinente (post-cita), 4/08/2009

Conceptuando sobre transformación organizacional

Este martes tuvimos una sesión del i-Talde 1 del Área de Transformación Empresarial de Innobasque. Estamos trabajando sobre la conceptualización de los "modelos basados en personas"; de hecho, éste es el objeto de este i-Talde 1.
Es un bonito y gran reto.
Aquí tenéis el link al trabajo que menda ha elaborado, bueno es un borrador, que a vuelta de verano seguiremos debatiendo en el i-Talde 1, y espero pulir con aportaciones de todos, pero la esencia ya está. Para mí es la continuación a "Guías para la transformación", la segunda vuelta de tuerca: "Conceptuando sobre transformación organizacional. Hacia un tránsito del trabajo abstracto al trabajo cogntitivo"

Retomo algún comentario de la sesión y hago alguna pequeña reflexión de temas que me lo sugieren...
Por un lado, en la apuesta por estos "modelos" (lo entrecomillo porque reiteramos una y otra vez que no hay modelos, cada organización es un "modelo" distinto) afloran muchas contradicciones y se producen muchos conflictos; no son caminos llanos y fáciles. Todas las personas que los hemos vivido sabemos que son procesos complicados y llenos de momentos de crisis y contradicciones; no es que el proceso introduzca mayor contradicción al sistema, sino que sencillamente partimos de unas formas de organización, de trabajo, de producción, de gestión que son fuente continua de contradicción, y en estos procesos afloran estas contradicciones. Si no afloran no se pueden superar. En cambio, lo habitual suele ser arreglárnoslas más o menos conscientemente para tapar las contradicciones. Huímos del conflicto, en lugar de elaborarlo.
"Estas contradicciones -nos decía Alfonso- son precisamente las que nos permiten avanzar. Si no se tratan las contradicciones, si sólo tratamos lo expuesto -por ejemplo, lo que resulta visible en las experiencias de transformación que se están analizando como ejemplo y contraste-, no nos ayuda a entender ni a avanzar".
Tratar las contradicciones requiere tener una amplia base conceptual. Esta base conceptual es la "herramienta" (por decirlo de alguna manera) que nos permite que cada caso, cada organización avance, y lo haga de forma genuina. No se trata de implantar un modelo x que ha funcionado en otro lugar (de esto de replicar modelos saben mucho las modas de gestión...).
El problema no está en descubrir un nuevo "aire" u orientación que hay que dar a la gestión, sino un replanteamiento profundo de las formas explícitas e implícitas de gestión. Porque lo que realmente falla es que las formas de gestión y de trabajo están orientadas al trabajo abstracto y no permiten la emergencia del trabajo cognitivo. Si no estás familiarizada con estos conceptos, que es lo más probable, la frase anterior no te dirá nada. Precisamente, en el trabajo que antes os comentaba, como el subtítulo mismo lo indica, ése es el eje y el documento trata de hacer una aproximación a lo que significa esta frase y a sus implicaciones: necesidad de tránsito o transformación.
Pretender favorecer estos procesos de transformación con la difusión de 10 ideas sencillas expresadas en una línea cada una, sería algo así como pretender que con la difusión de 10 ideas sobre cirugía convirtiéramos a todo el mundo en cirujanos. A cada uno su papel. Ideas sencillas de divulgación pueden ayudar a las personas a adquirir hábitos saludables y prevenir así determinadas enfermedades, o identificar algún síntoma que les indique que han de acudir al médico, pero no debiéramos pretender utilizar este método para algo que requiere una considerable base conceptual.
Habrá que tratar de que muchas personas se manejen holgadamente en los lenguajes y enfoques de esta base conceptual (muchos cirujanos), y a su vez, seguir avanzando sobre toda esta base conceptual, seguir investigando sobre cuáles son los elementos determinantes y cómo se puede operar en ellos. Hay mucho aún que decir.
Me gusta la metáfora del cirujano, porque es innegable que el conocimiento está en la práctica: nunca diremos de alguien que es un buen cirujano si no ha tocado un bisturí en un quirófano, por muchas experiencias de laboratorio con muñecos que haya hecho. Y además, en cada intervención se está jugando algo muy importante: nada menos que la vida de un paciente, en un caso, o el futuro de una organización y de sus personas en la misma, en el otro. Está claro que en ambos casos hay que tener mucho conocimiento para poder hacer un buen trabajo y hacer frente a los imprevistos que puedan surgir, y evidentemente, no me refiero a conocimiento académico. En el caso de la cirujía, algo se aprende en la universidad, en el caso de la transformación organizacional, no, sino más bien, todo lo contrario. El conocimiento, hoy por hoy, está en otras partes.

En la sesión se habló también de lo crítico que es la orientación al cliente. Era una de las características comunes a las empresas visitadas. Parece que cuando una organización es muy pequeña la relación con el cliente es natural, es in-mediata. Pongamos el caso de una empresa de servicios informáticos de 4 trabajadores. Ahora bien, cuando la empresa va aumentando de tamaño, la cosa cambia. Aquí Alfonso hacía una apreciación que entronca de nuevo con el planteamiento que estamos haciendo: Pero ¿cuál es el problema en las empresas de mayor dimensión? ¿Se trata de que necesitan implantar alguna herramienta de gestión accesoria para orientarse al cliente, y vamos a estar dando fuelle a pseudoherramientas que se propaguen a la velocidad de la luz para -supuestamente- ayudar a las empresas al objetivo de "orientarse al cliente"? ¿o asumimos que, al aumentar el tamaño de la empresa, se introducen formas de gestión y de trabajo que interfieren entre las personas de la organización y los clientes, haciendo que se pierda la orientación al cliente que antes sí había? ¿apostamos con decisión por cuestionrnos las formas de gestión y concepto de trabajo que tenemos, para poder dotar a las organizaciones de una natural orientación al cliente?
Creo que no tiene sentido un trabajo que no aporte nada a nadie. Si defino el cliente como el máximo receptor de la aportación que hago: ¿tiene sentido trabajar sin orientarme al cliente? Para mí, rotundamente no. Luego, si se da, es que algo extraño -aunque nos cueste verlo así- está interfiriendo y no permite esta orientación que debiera ser natural.

foto de Mariana Gentili en flickr
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Posts y cuadernos relacionados:
Cuaderno de Trabajo 3
Cuaderno de Trabajo 2 - Lógicas
Conceptos para la transformación, 15-05-09 (post anterior sobre este tema)
Escritos de Alfonso Vázquez
Propiedad, poder, trabajo, Alfonso Vázquez, 13-07-09 (documento para este debate)
Profesional de alto nivel, 2-08-09

Cambiando el concepto de trabajo (Patxi Aizpurua)

Patxi Aizpurua ha tenido la fortuna, como él mismo dice, de asistir al taller donde se presentaba por primera vez la experiencia de transformación de la cooperativa Mol-matric, dentro de los actos de la Setmana de l'economia cooperativa.
Hobest ha tenido también otras intervenciones en este evento: conferencia de Alfonso Vázquez (Ver vídeo-fragmento) y participación en el acto de presentación del libro "Democràcia Econòmica".
Agradezco mucho a Patxi que me haya hecho llegar estas notas sobre este acto para poderles dar difusión en este medio. Creo que realmente merece la pena...________________________
CAMBIANDO EL CONCEPTO DE TRABAJO

Patxi Aizpurua

Dentro de los actos de la SETMANA DE L’ECONOMIA COOPERATIVA celebrada en Barcelona entre el 30 de junio y el 2 de julio de 2009, tuve la fortuna de asistir a la presentación "Mol-matric: una experiencia d’éxit".
Mol-matric es una empresa cooperativa fundada hace 27 años, dedicada a la matricería, de una dimensión de 50 personas y que hace tres años inició una experiencia de transformación.
El comienzo de la experiencia se inició con un proceso de reflexión por parte de un equipo de 12/15 personas sobre su situación y definieron lo que querían hacer con su futuro.
Dicho futuro pasaba por desplegar varias ideas fuerza:
  • Abrir Mol-matric a otros sectores, como el ferroviario y el eólico, en lugar de estar concentrados al 100% en automoción. Asimismo, internacionalizarnos.
  • Incrementar las capacidades de gestión de todas las personas, migrando de una concentración piramidal de dichas capacidades en la gerencia, a equipos de personas que se apropian de su actividad de un modo integral.
  • Potenciar la cooperación y la solidaridad como razón de ser de la experiencia Mol-matric.

El Coordinador de Mol-matric (Juan Pedro Solá) y el presidente de la Junta Rectora (Fernando Cid) fueron desgranando la experiencia que están viviendo y sus deseos de lo que quieren seguir haciendo.
Algunas de las ideas comentadas en la exposición y posterior conversación que se produjo, fueron:
  • No hicimos un plan estratégico documentado, numérico para los próximos 3/5 años, realizado por unos pocos, justo lo contrario, participó el 30% de las personas, reflexionamos sobre las oportunidades y nuestras capacidades, elaboramos nuestra guía de intenciones y lo refrendamos en la asamblea.
  • Nos preparamos para recorrer esa guía, sacamos los certificados de calidad que nos permitieran estar en esos sectores tan exigentes, nuestras inversiones no las hacíamos con la ortodoxia habitual, para tener un payback muy corto, las hacíamos con holgura, para que nos permitiera recorrer el camino.
  • Cambiamos el contexto organizativo, se crearon equipos que van integrando capacidades de gestión, no sólo de producción, sino comerciales, de recursos humanos,etc.
  • No tenemos estructura, todos hacemos de todo, los responsables no son los más listos, sino que tienen otros valores y como hay otras personas que saben más de su materia, ello nos obliga a cooperar con los otros y así aprendemos.
  • Practicamos la solidaridad entre nosotros y con el exterior. Todas las personas de Mol-matric tenemos la seguridad de que ante un problema de uno, estamos los demás. Hacemos que nuestro trabajo sea un disfrute. “No me cabe el corazón en el cuerpo de lo contento que me pongo por ser de Mol-matric”.

Tras escuchar esta presentación, se aprecia que hay personas que sí son conscientes que hay una Krisis (cambio) del concepto de trabajo, de un trabajo abstracto, que busca el empleo/puesto de trabajo, para incorporar trabajo “fisico” a una mercancía cuya valorización y consumo genera una acumulación, que vuelve a incorporarse a la lógica de producción y consumo, para seguir generando más acumulación, dentro de la lógica de más valor, a un trabajo cognitivo, donde el saber, la emoción y la acción están en marcha en todas las personas, para generar riqueza social.
Lejos del trabajo fragmentado, basado en tareas, "esto es mío y esto tuyo", se despliega el conocimiento en base a la participación, a la cooperación, a la solidaridad, haciendo cada vez más natural el trabajo cognitivo y sabiendo que lo hacemos no para la lógica de acumulación de más valor ( ¿para quién?) sino para nuestra riqueza social.
La experiencia de Mol-matric evidencia que sí es posible otra lógica.
En general, estamos esperando a que la crisis pase, "ya se reactivará la demanda", "aparecen brotes verdes”, sin embargo, pocos queremos afrontar el cambio del concepto de trabajo que se está produciendo cada vez más intensamente. El trabajo cognitivo no puede emerger en toda su potencia en los contextos sociales en los que nos encontramos, ya sea la relación laboral, la distribución de la riqueza, la representatividad social y política, y sin embargo lo hará, es imparable, pondrá en evidencia las paradojas de querer construir un nuevo modelo productivo sobre las bases del trabajo abstracto y de la lógica de acumulación del valor.
Gracias a las personas de Mol-matric, y animarles en su intento de que la lógica de la riqueza social es posible.


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Posts e informaciones relacionados:
Cuaderno de trabajo sobre Nuevas formas de consultoría en mi wiki