Atrae por su ética de la autenticidad y la rara combinación de lucidez, honestidad intelectual y desnudez espiritual de su escritura
"actuar no es otra cosa que cambiar yo misma, cambiar lo que siento o lo que pienso, pero ese cambio que tanto deseo no es suficiente con desearlo para obtenerlo. No puedo hacerlo sino indirectamente. Sufro, deseo, dudo, ignoro; es una de las maneras de decir que lo que soy no me satisface y que esto ignora mi autorización para ser yo. Lo que soy, lo padezco. Sin embargo tengo poder sobre lo que padezco, mi definición de alguna manera de lo que es actuar: existo en la medida que puedo. (...) Mañana es esa persona que no puedo cambiar inmediatamente. Esa relación entre el presente y el futuro es lo que constituye el tiempo"
Extraido de "Las batallas de la 'Virgen roja'" de Patricia de Souza, artículo publicado en El País. (Acceder)