tag:blogger.com,1999:blog-7432262224823656852.post2813860545021224390..comments2023-05-27T12:06:38.596+02:00Comments on Maite Darceles: Generando confianza (II)Maite Darceleshttp://www.blogger.com/profile/06014723041283686366noreply@blogger.comBlogger6125tag:blogger.com,1999:blog-7432262224823656852.post-23286557615108858412010-08-05T20:21:09.694+02:002010-08-05T20:21:09.694+02:00DE CONFIANZA Y AMOR
Gracias, Maite, por tu amable...DE CONFIANZA Y AMOR<br /><br />Gracias, Maite, por tu amable e interesante respuesta. Contiene varios temas muy sugerentes, en mi opinión, pero voy a centrarme en aquel en el que me/nos/te interrogas por la relación entre confianza y amor, que me parece inquietante.<br />Como ya me dijiste en una ocasión, hace algunos años, “querer puede significar muchas cosas”; en efecto, pero también hay muchas formas de amor. Sin la menor pretensión de ser exhaustivo, voy a recorrer brevemente algunas para conectarlas con la idea de confianza que propones:<br />En el “amor cortés” (o “romántico”), el amante activa su “imaginario” (normalmente, coherente con el “imaginario social” según las épocas) para “simbolizar” el objeto deseado, la amante; lógicamente, la condición para que el símbolo permanezca en el imaginario es que sea inaccesible en términos de “realización” del deseo sexual, ya que en ese caso se destruiría –o se transformaría en otra “cosa” diferente a lo deseado. Aquí, la confianza no juega papel alguno, ya que la relación con el “otro” sólo pertenece a lo “simbólico”, es decir, sólo está en la persona que ama o que desea, indiferentemente del “otro” (en “Muerte en Venecia” tienes una magnífica recreación (¿extrema?) de este tema).<br />En el amor hacia los hijos, casi incondicional en la mayoría de las personas, tampoco es la confianza la que lo marca ni sigue: existen amplias zonas de “desconfianza”, de incertidumbre sobre las contradicciones de su conducta en relación a lo que supondríamos deberían ser. Podemos confiar –más o menos- en nosotros para poder aportarles algo valioso a través de los meandros de la realidad y de la vida, o bien, tratar –inútil, cuando no contraproducentemente- de utilizar una disciplina “correctiva”. Pero tampoco tiene que ver con la confianza.<br />Sí hay un terreno donde la confianza se “supone”: Es el “amor conyugal”, sujeto a la ley, a la norma social, y socialmente “vigilado” y sancionado. Esta confianza está basada en las ben(mal)diciones del sacerdote (aunque la “unión” no sea realizada según la religión, es una “norma social” establecida): “Os declaro marido y mujer hasta que la muerte os separe”, “lo que ha unido Dios, no lo separe el hombre”. Las consecuencias de esta confianza normativamente obligada (aunque sea asumida por los cónyuges) es nefasta; al final (o al principio, como yo también sé), el deseo actúa y deriva las acciones, las introduce en un campo de complejidad acentuado, cuando no desembocan en el “castigo social” por “violar” la norma –que incluye el rechazo y la exclusión social- o, en otras culturas, en consecuencias más salvajes como los latigazos públicos o la lapidación (normalmente, de la “adúltera”…).<br />En tu último interrogante, Maite, supongo que te refieres al amor pasional. En éste la confianza es imposible, ya que, precisamente, se basa en el deseo de poseer a un ser que, a la vez, trata de poseerte a ti (y no hablo de una posesión “típica”, “machista”, sino del deseo siempre reproducido, una vez consumado, del otro). No hay “contrato” posible, norma exigible, ley articulable… Y el deseo no confía, opera, se realiza o se frustra, reaparece y se reproduce en formas diferentes, imposibles de ser aprehendidas por los seres deseantes… Por eso, tal vez, es el menos social, pero el más potente.<br />Pues que los amores te sean favorables, Maite. Un beso.<br />AlfonsoAlfonso Vázquezhttps://www.blogger.com/profile/07100384509618136565noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-7432262224823656852.post-78012593493220964822010-08-03T11:37:58.311+02:002010-08-03T11:37:58.311+02:00Muchas gracias, Alfonso, por tus elogiosas palabra...Muchas gracias, Alfonso, por tus elogiosas palabras y tus extensas e interesantes aportaciones.<br />En cuanto a tu primera puntualización, estoy plenamente de acuerdo. Lo que trataba de expresar es que cuando sentimos confianza es el resultado de un pasado -corto o largo en Cronos- que se ha tenido que vivir con cierta intensidad en Kairòs. Pero no se trata de un proceso siempre acumulativo, sino que fluctúa... son etapas, como dices.<br />En tu segunda puntualización, creo que te entiendo bien, y también comparto. No se trata de apostar por contextos de confianza como fin, en el vacío, ya que esto en la práctica puede tener derivas muy negativas: manipulación, hipocresía, distorsión de la realidad… Sino de apostar por contextos de libertad. Estoy de acuerdo en "relajar" la apuesta por la confianza y entender que no pasa nada si también tenemos relaciones/momentos/zonas de desconfianza... <br />Ahora bien, creo que a muchas personas les dará bastante “vértigo” hablar de contextos de libertad: es como si tuviéramos miedo del concepto mismo de personas actuando en libertad (“¿y si les da por…?”). Creo que es pertinente, por ello, insistir en lo que nuestra experiencia práctica nos enseña: Apostamos por generar contextos de libertad en las organizaciones y éstos dan lugar a contextos de muchísima mayor confianza y cooperación, dando lugar a dinámicas de trabajo más ricas, realizadoras y eficaces.<br />También estoy de acuerdo en lo que planteas sobre la coherencia, es decir, que es una meta inalcanzable. Aun así, creo que hay que perseguirla como meta, al igual que la libertad, la autenticidad y ¿hasta el amor?<br />Una última reflexión… Confianza y libertad... relacionadas desde muchos ángulos... <br />Cuando hablamos de “confiar en alguien" (también en un grupo: un equipo, una cuadrilla, la familia, etc.) creo que estamos hablando de estas dos cosas:<br />- <b>Confiar es creer que la otra persona va a responder como tú crees o quieres</b> (desde el respeto y consideración hacia la otra persona, es decir, aunque no sea la forma en que tú responderías…).<br />- <b>Confiar es sentirte libre de mostrar tu intimidad</b> (deseos, sueños, debilidades, frustraciones, miedos, expectativas...) porque confías en que el otro (u otros) no te va a hacer daño, en que no va a utilizarlo en tu perjuicio, sino que esta conexión más profunda va a ser positiva para ti. <br />Ambos aspectos se refieren a cómo actúo yo en relación a otro(s). La ausencia de experiencias positivas -o la realidad de experiencias negativas- en la primera, conlleva un estado de incertidumbre y de frustración, que según el tipo de relación se traducirá en mayor grado de control, en distanciamiento, en desconexión, en miedo,... Una relación sana y realizadora requiere un grado de confianza en este aspecto. <br />La segunda se refiere a cómo de segura o libre me siento para mostrarme ante otros. A mayor grado, mayor realización personal. <br />¿Qué hacer cuando los mundos de dos personas son tan distintos que aunque haya amor, parece que no se consigue avanzar en el conocimiento mutuo?<br />Besos,<br />MaiteMaite Darceleshttps://www.blogger.com/profile/06014723041283686366noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-7432262224823656852.post-14354024450657718452010-08-01T15:37:25.491+02:002010-08-01T15:37:25.491+02:00Gracias, Maite, por tu interesante post y tu siemp...Gracias, Maite, por tu interesante post y tu siempre delicioso estilo. Aunque coincido ampliamente con tu argumentación, hay algunas cosas que me “chirrían”. Así, cuando dices que la confianza es el resultado de un recorrido (no es una “cosa”, estoy de acuerdo), pienso que tampoco es así; es, más bien, un estado temporal y, ciertamente, difuso. No es un “final” de un recorrido, sino, tan sólo, etapas del mismo.<br />Citas a mi amigo Miguel Ayerbe a través de una cita de nuestro amigo Borja; sobre su concepción del liderazgo siempre hemos mantenido una (cariñosa) diferencia. No me gusta la idea de que liderar sea generar contextos de confianza, ya que contiene (como muestras en tu escrito) el germen, cuando no la intención decidida, de la manipulación. Así, el confesor o el psicoanalista tienen que generar confianza –y confiar en que la ha generado- para cumplir su fin de dominación del penitente o del paciente. Y conocemos ejemplos de “liderazgo” que se basan (¿) en la “confianza” para asegurar el dominio de las personas. Mi apuesta siempre ha sido, como sabes, generar espacios de libertad, en los que pueden existir zonas de confianza y, ¿por qué no?, zonas de desconfianza. ¡Y no pasa nada!<br />Tampoco me parece correcto buscar, como base de la confianza, la “coherencia” entre lo que se dice y se hace, o, como tú pareces preferir, entre lo que se siente y se hace. La coherencia entre lo que se dice y se hace es imposible, ya que el “decir”, el discurso, está siempre mediado por el lenguaje, por los conceptos, y por “lo social”; y la coherencia entre lo que se siente y se hace presupone otra imposibilidad: Sólo “creemos saber” qué sentimos, no sabemos lo que sentimos (entre otras cosas, porque su variabilidad es alta), por lo que tampoco podemos perseguir una coherencia.<br />En mi experiencia personal –que tú conoces de cerca en los últimos años- me he basado mucho más (como ya comenté en algún foro sobre “creer en las personas”) en el “querer”, en el “desear”, que en una confianza imposible. Sabes de qué estoy hablando: Cuando la confianza que tenía en personas a las que apreciaba mucho ha fallado, he recurrido al “querer” para tratar de reconducir las situaciones; a veces ha funcionado, a veces no, y en el futuro… ¡Dios dirá!<br />Gracias de nuevo, Maite, y a seguir deleitándonos!<br />AlfonsoAlfonso Vázquezhttps://www.blogger.com/profile/07100384509618136565noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-7432262224823656852.post-74263599892737525852010-08-01T15:36:42.852+02:002010-08-01T15:36:42.852+02:00Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.Alfonso Vázquezhttps://www.blogger.com/profile/07100384509618136565noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-7432262224823656852.post-30570863020026851792010-08-01T11:25:54.211+02:002010-08-01T11:25:54.211+02:00Mila esker, Iñaki. Un placer tener lectores tan fi...Mila esker, Iñaki. Un placer tener lectores tan fieles y agradecidos ;-)<br />À la prochaine!!Maite Darceleshttps://www.blogger.com/profile/06014723041283686366noreply@blogger.comtag:blogger.com,1999:blog-7432262224823656852.post-18093560926288664582010-07-31T11:32:09.977+02:002010-07-31T11:32:09.977+02:00Directo a mi Delicious.
Como siempre, un placer l...Directo a mi Delicious.<br /><br />Como siempre, un placer leerte.<br /><br />Eskerrik asko, Maite.Iñakihttps://www.blogger.com/profile/15715524896721604557noreply@blogger.com